lunes, 15 de septiembre de 2008

...y sigo soñando...

Casi 30 años y sigo soñando. Dicen que los sueños son sólo cosa de niños, que uno debe encadenarse al suelo cuando los últimos restos de acné adolescente desaparecen de su cara. Dicen que, cuando pasa el tiempo, se diluyen, se evaporan o simplemente desaparecen. Pero yo sé que los sueños buenos, los mejores, son los que uno tiene cuando pasan los años.

Sé abrir bien los ojos cuando algo merece la pena. Sé cerrarlos cuando tengo que ver lo que con ellos abiertos no encuentro. Sé sorprenderme y reir. Sé acercarme a la gente y ser capaz de mirarla además de verla. Sé reir, llorar, soñar y ser racional a partes iguales, aunque parezca la más absurda de las contradicciones. Sé dar la mano y soltarla cuando la ocasión lo requiere. Sé regalar un abrazo a tiempo y despreciarlo cuando no significa nada. Sé escuchar y aprender. Sé hablar y aprender más aún. Sé acercarme a quien ve más allá de sus narices y huir de la impertinencia de quien no tiene nada que decir y no se ha dado cuenta. Sé leer un cuento, disfrutarlo y entenderlo y volverlo a leer. Sé rechazar a quien no sabe entenderlo y piensa que un cuento es algo de niños. Porque hay cosas que no son de niños. Simplemente son.

No se vive de sueños pero, gracias a los sueños, se vive. Y yo vivo cada día porque me duermo y sueño, me despierto y sigo soñando. Martin Luter King comenzó su discurso más famoso diciendo “Una vez tuve un sueño…”. Y yo lo hago mío porque, a mis casi 30 años, cada mañana tengo un sueño. Hay quien pone reglas a los sueños, quien le dice: ‘para seguir siendo soñando no puedes crecer’. Pero se engañan aquellos que ponen reglas a los sueños. Son falsos soñadores. Y lo sé porque, a mis casi 30 años, aún sigo soñando.

10 comentarios:

Ramón de Mielina dijo...

"(...) Y los sueños, suenos son"

:-)

Anónimo dijo...

Que bonito es soñar.....

Anónimo dijo...

Pues sí, yo también sueño pero cada vez hay menos que lo hacen... O no llegan o se pasan.
Ra.

Ramón de Mielina dijo...

Ay, Segismundo que voy a tener que devolverte a la torre para que sueñes a gusto! :-)

Anónimo dijo...

Bienvenida al club de los ingenuos ;)
JN

Murphy White dijo...

¿Al castillo? No, no, que no me va eso del "Ay, misero de mí! Ay, infelice!!!"

Anónimo dijo...

¡Apurad cielos preteno, ya que me tratais así!!! (qué tiempos...)

raquel dijo...

mi madre dice q de ilusiones también se vive.
y es verdad q sin ilusiones, sin sueños, sin esperanzas... habría momentos en la vida que no tendríamos fuerza de seguir hacia adelante.

Anónimo dijo...

Felicidades!!! Porque... hay poca gente que sueña...

Anónimo dijo...

Contentos de poder soñar contigo...!!!!